Que las mañanas no tengan mis sueños
que las mentiras parescan mentira
que los caminos no lleven a roma
que las ventanas se reompan a trisas
Que los que lloran recojan las lagrimas
que los que gritan, no tengan mis dichas
que los de ahora seamos nosotros
que los de antes no tengan mentiras
Que los amores prohibidos se cumplan
que los espejos nos digan sin prisa
el labor de un cruel sacramento
de variedades y nobles caricias
Que los amantes se roben casadas
que los maridos no tengan rutina
que los que esperan no cuenten las horas
que los olvidos no tengan mis dias...
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